PÍLDORAS DE BIENESTAR
Pasividad, asertividad o agresividad
Aprendiendo a ser asertivo. Veamos un ejemplo
Un amigo te propone un plan que no te apetece. ¿Cómo serían las posibles respuestas?
Pasiva: Verás, no sé si puedo… Te lo voy diciendo. O del tipo: Fenomenal, ¡nos vemos! (cuando no te apetece).
Asertiva: Gracias X, no me apetece. Nos vemos otros día.
¿Por qué ser asertivo?
Ser asertivo te ayuda en tus relaciones. Todo es más claro. Las cosas se dicen de forma más directa y no se forman tantos líos ni malos entendidos. Es relacionarte de una manera más honesta y verdadera con el otro, y el otro contigo.
También es relacionarte más fielmente contigo, con menos conflicto entre lo que sientes y piensas y lo que dices y haces. Es estar en armonía contigo mismo.
Aunque la definición de ser asertivo parezca a priori fácil, no lo es. De hecho, éste es uno de los temas que salen con frecuencia en terapia. Todo lo que tiene ver con poner límites al otro, con que no siempre guste lo que decimos (dicho de una manera respetuosa) o lo digan…
Aprendiendo a ser asertivo. Recomendaciones
– Ser asertivo es algo que se puede aprender. Poco a poco. Y así será. Si intentas dar pasos de gigante, lo más probable es que te vayas al lado agresivo.
– Si quieres probar, o seguir aprendiendo a ser asertivo, prueba con pequeñas cosas. Que vayas viendo lo que sucede, y cómo te sientes.
– Expresar tus opiniones, decir no, poner un límite… no es ser mal educado ni es atacar al otro. Aunque eso sí, hay muchas maneras de decir las cosas.
– Puede ser que no des tu opinión ni muestres lo que quieres porque no sepas lo que es. Ese sería el primer paso. Saber que piensas, sientes, necesitas…
– Exponer tus ideas, tus necesidades… no implican que el otro las acate. Es tu verdad, no la verdad.
– Tú puedes ser asertivo. El otro también lo puede ser contigo. Es un continuo aprender a relacionarnos más honestamente.
– Habla desde ‘ti’. No desde el ‘tú’. Si hablas desde ti, hablas de lo que a ti te pasa. Si usas el tú, puedes hablar desde algo que tú interpretes, y suele ser recibido como acusatorio.
– Tus derechos y tu libertad, terminan donde empiezan los derechos y la libertad del otro.
Aprendiendo a ser asertivo. Recuerda que es un camino, se hace paso a paso.
Este es uno de los temas que me habéis propuesto para escribir. Si quieres que aborde algún otro tema, solo tienes que decirme y me pongo manos al teclado.
Y siempre,
Caminando Contigo…
Consulta de psicología en Atocha-Arganzuela y terapia online
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